sábado, 26 de diciembre de 2009

SEGURIDAD FRENTE A DERECHOS HUMANOS...

¿Y dónde quedan los llamados derechos Humanos frente a la mal llamada "Guerra" contra el Narcotráfico del Gobierno Federal?

En los acontecimientos que han estado sucediendo en éste contexto nos damos cuenta de que no participa el Ministerio Público, el cual debe perseguir los delitos según la Constitución; además no existen órdenes de aprehensión, ni órdenes de cateo debidamente expedidas por Juez competente, lo cual constituye una clara violación a los preceptos constitucionales.

Para evidenciar aún más la fallida guerra contra el Narcotráfico del Gobierno Calderonista, se hace necesario tomar en consideración la afirmación del Ministro Myagoitia, presidente de la SCJN, que refirió en su informe de labores del año 2009; en tal informe se muestra el rezago de decenas de miles de presuntos delincuentes ante las mal formuladas consignaciones del M.P. y su poca efectividad de investigación -recordemos que en México solo se detiene a los probables delincuentes dentro de las siguientes horas de cometido el ilícito, lo que evidencia que en nuestro país se reacciona pero no se investiga- y con lo anteriormente mencionado lógicamente se logra la liberación de los detenidos.

Ante la pequeña muestra expuesta cabría preguntarnos lo siguiente...

¿Es necesaria la reducción de los Derechos Fundamentales ante la necesidad de Seguridad?

¿Será posible que solo nos estén creando un escenario de inseguridad para justificar la ampliación de la actuación de las autoridades frente a la muy resentida reducción de los Derechos Fundamentales?.

Ustedes tienen las respuestas…

TAN LAMENTABLE ES LA CAIDA DEL PAPA COMO TAMBIÉN ADJUDICAR PROBLEMAS MENTALES A LA MUJER QUE CAUSÓ EL INCIDENTE

Es lamentable lo sucedido al Papa y al Cardenal respecto a su caida, pero igualmente es muy lamentable que el vaticano etiquete a la mujer como alguien "con problemas psicológicos" sin un previo estudio.

Es simplemente una mera opinión sin valor objetivo lo mencionado en el comunicado del Vaticano respecto de la mujer que accidentalmente hizo caer a los dos miembros de la Iglesia, aduciendo que es alguien que se ecuentra con problemas mentales.

Es solamente alguien que sintió las ganas de acercarse al Papa y lo realizó de manera incorrecta y apresurada, causando el desafortunado incidente.

Es claro que pone al descubierto la falta de seguridad de un personaje público como lo es el Papa, mejor que den gracias de que no se trataba de un fanático que tuviera no solo un arma, sino la sola intención de lastimar al aludido personaje.

En ocasiones la propia iglesia conlleva en sí misma su penitencia ante su pecado de crear fanatismos desbordados que difícilmente pueden ser controlados. Una probadita más de que también el Papa es de carne y hueso como cualquier mortal de ésta hermosa tierra.

Saludos

jueves, 10 de diciembre de 2009

EL PROFESIONAL DE LA POLÍTICA Y EL POLÍTICO PROFESIONAL

El profesional de la política o politólogo es un científico de la política, es decir que es aquel que desarrolla modelos y teorías que buscan dar explicación a los fenómenos políticos a partir de la observación, análisis y aplicación de metodologías y técnicas de carácter científico rigurosamente, que se confrontan a la realidad para otorgarle validez, lo cual se logra solamente con una investigación estrictamente objetiva –sin ser partidario de partidos políticos, ni “políticos” e incluso ideologías-.

En cambio el Político profesional es el comúnmente conocido como “el político”, el cual se dedica a la práctica de la actividad política desde lo que se ha dado en conocer como la “real politik”. La actividad principal de éste político profesional debe ser –como no siempre lo es- la gestión política y la aplicación de las teorías desarrolladas por el politólogo, el cual en algunos casos prácticos ejerce la función de asesorar al “político”, guiándolo en su gestión de soluciones.

Es importante mencionar que debe existir forzosamente una conexión entre el aspecto teórico –ideas- y el ámbito de la praxis –práctica-, el cual tiene que ser necesariamente materializado entre el profesional de la política, que asume el rol de ideólogo y desarrollador de soluciones teóricas, y el “político profesional, siendo éste último el encargado de gestionar y ejecutar las soluciones propuestas por aquel; logrando de ésta manera un equilibrio entre lo racional y lo práctico para no caer en las pasiones que desvían y corrompen –fetichizan diría Enrique Dussel- al mundo de las decisiones que afectan a toda la población, para bien o para mal, es decir al mundo de la política.